Y eso es lo que ha sucedido esta semana para unas y otras. El junior femenino ha ganado 76 a 65 pero para mí han perdido. Estas no son las chicas que a base de esfuerzo y sacrificio compiten a cualquier equipo. Es un equipo que ya no demuestra solidaridad entre ellas, que entrena mal y que no cree en su entrenador. Cada una sabe mejor que el entrenador todo, la táctica, la técnica, la defensa.
No se les puede decir nada, no se les puede reprochar nada, incluso no se puede ni cambiarlas. Hemos metido casi 80 puntos atacando mal seleccionando peor, corriendo a veces y casi sin defender.
Ahora vienen los equipos de verdad , la perita en dulce ya pasó, chicas así no vamos a ningún sitio, la realidad nos pondrá en nuestro sitio , y será duro.
No se puede vivir del recuerdo, el año pasado hay que olvidarlo ya.
Os invito a entrenar esta semana a tope y dejarnos hasta la última gota de esfuerzo la próxima semana, que nos podamos mirar a los ojos sin reprocharnos nada.
Y como todo anverso tiene su reverso, el senior ha jugado contra el favorito de primera nacional, Valencia Basket, y es para estar orgulloso de las chicas. El propio entrenador contrario, en una actitud que le honra, ha comentado que el resultado no era fiel reflejo de lo que había sucedido en la pista. Por ello gracias a todas, su trabajo, entrega, esfuerzo e ilusión ha estado presente en pista 30 minutos, el último cuarto nos ha sobrado, entre el cansancio, las faltas de jugadoras importantes, las bajas de Paula y Celia etc… se nos han marchado 6 a 26 , pero lo dicho ahí queda nuestro intento por competirles. Chicas ahora no nos durmamos en los laureles , debemos marcar en rojo el partido con Denia, hay que salir con las mismas ganas.