Partido en el que el entrenador rival nos conocía perfectamente a todas.
Un primer periodo devastador por la presión del rival. Los doses y su energía defensiva hacían que realizáramos malos pases con sus correspondientes pérdidas de balón y su acierto en el aro.
Al centrarnos un poco más y repartir el balón conseguíamos cruzar y llegar al aro. Cuando juegan en equipo, levantan cabeza y se mueven para recibir las cosas salen y suben los puntos al marcador. Terminamos el tercer periodo 63-36 por un buen trabajo en la pista. Una pena que no pudiéramos más. Nos volvemos a salir del encuentro, dándole al rival facilidad para finalizar la canasta.
Sensaciones buenas y mejor resultado en la defensa.
¡Seguiremos trabajando! ¡¡Ánimo chicas!!