Golpeando la roca: Eso es lo que mi equipo esta haciendo, seguir ante las dificultades, no rendirse, no amilanarse, picar, picar hasta que logremos el objetivo. Y es que la victoria era muy importante y en pista habitualmente negativa para nuestros intereses logramos salir victoriosos.
Es cierto el rival tenía alguna baja, pero no le resta ningún merito. Primero por el juego que desarrollamos, por la defensa, por la reacción en los momentos claves y por el sufrimiento final, pero todos juntos y creyendo en nosotros mismos.
La victoria nos saca momentaneamente del atolladero, aunque Alzira tiene un partido menos y mismo número de victorias.
Llegan momentos claves una serie de tres partidos que debemos intentar vencer, partido a partido, paso a paso, golpe a golpe haciendo que al final la roca se parta.
«Cuando nada parece ser de ayuda, miro a un picapedrero golpeando la roca tal vez hasta cien veces sin que aparezca ni una sola grieta. Sin embargo, al golpe ciento uno la rompe en dos. Sé que no fue ese último golpe el que la partió, sino todos los anteriores»
